Monday, January 26, 2015

VIVIENDO CON UN CORAZÓN ENDURECIDO





    Podrás tener todos los bienes mundanos que cualquiera desearía tener y contar con la belleza que impresiona a los demás, transfigurando tu carácter en las relaciones con el mundo, tu propio universo de cosas y personas que se tornan indispensables en tu diario vivir. No obstante, si no tienes un corazón noble para entregar y una actitud de humildad al trato con los que te rodean, tu sardónica sonrisa delatará una vaciedad de espíritu sostenida únicamente sobre los endebles pilotes de la vanidad, engreimiento y falso orgullo. Con el devenir de las cosas y el transcurrir del tiempo, de forma inexorable aparecerán al desnudo las falsedades y contraventuras de tu vida. Y nada importará si de aquello nadie se entera, pues el peor juez a ser encarado se encuentra en tu conciencia, y ésta justamente es inevitable, inviolable e irreversible.   

Friday, January 23, 2015

EL DIÁLOGO NUNCA ES DE SORDOS



ELECCIÓN DEL DIÁLOGO
    Camila, la sabionda, solo apuntaba a proliferar palabras de oscuro entendimiento y escaza utilidad en el consuetudinario orden de su contexto, y con regularidad su desgarbada desnudez para expresarse mostraba el ánimo de no ser entendida por sus interlocutores. Mas sin embargo, los demás entendían perfectamente su vanidad intelectual y la amplia necesidad de reconocimiento. Al poco tiempo, sus oyentes se retiraron como en cascada porque el escuchar cosas ininteligibles les resultaba abrumador, intimidante, además de frívolo. Cuando estuvo sola, sin la presencia de un alma por solitaria que esta fuera, no obstante ello, persistió con sus discursos incomprensibles al promedio, pero fue hasta entonces que ella pudo escucharse a si misma. Grande fue la sorpresa de Camila cuando trató de entender lo que decía, ciertas palabras le parecieron tan complicadas, algunas en desuso, y otras casi en el olvido que la gente ni siquiera había escuchado en su vida. Peor fue cuando consultó el diccionario para tratar de entender ciertas expresiones, y mayor fue la sorpresa cuando descubre que la mitad de dichas palabras no aparecían allí. Luego de ello, comprendió que había estado en un error al hablar un lenguaje que los otros no alcanzaban a dilucidar. Cambió su forma de hablar, de ese lenguaje intelectual y sofisticado que la aisló de toda la gente que le escuchaba, a uno coloquial, menudo y ordinario. Ahora Camila es capaz de conversar, ser entendida y, al mismo tiempo, escuchar a los demás. Pero por sobre todas las cosas, Camila puede ahora escuchar a si misma el mensaje de las palabras que emergen de su corazón con aquella simplicidad solo semejante a la de un niño. Hoy, Camila tiene más amigos que antes, muchos la quieren y aprecian. Ella cambió el soliloqio intelectual de palabras rimbombantes, por el diálogo de entendimiento mutuo. Esa ha sido la diferencia que ha marcado su vida. La petulancia y típica sordidez de un corazón ufano se alejaron de su vida para dar paso a la humildad, probidad y parsimonia.      

Thursday, January 15, 2015

LA GUERRA INTERIOR


 
Una ojeada más profunda al mar de mi “psique” me ha sido permitida. Y en el intento del autoescrutinio, el olvido se posiciona compulsivamente minando toda pretensión introspectiva. Una actitud valiente sale de mi corazón para encarar mis propias impresiones, pero un pánico penetra hasta por los poros de mi piel, y de forma deliberada me alejo de la hostilidad del universo de pulsiones que parecen eruptar sobre mi como un furioso volcán, alojándome en la cómoda y nada amenazante configuración de mi ser. No obstante que soy el verdadero culpable de mis pesadumbres e indecisiones, me exonero de toda culpa, estúpida dicotomía, maligna paradoja psicotizante ; asumo que la interioridad tiene vida, y bajo esa instancia admito que la cobardía que me cubre al saberme débil y vulnerable traspasa el umbral de mi determinación. Quedo reducido a la nada, en la falsa placidez de un equilibrio que destruye silenciosamente un self soñado, un yo de largas batallas y ejercicios de poder y logro. Una vez más, el otro que subyace mucho más al fondo ha salido victorioso, mientras que, en tanto esto discurre, la ansiedad me conduce por senderos conocidos, y decido esconderme en la pasividad anquilosada de mi voluntad, al equilibrio malsano y pseudoevolutivo.