AMOR AJENO
No imaginas cuanto deseo un
momento para estar contigo, disfrutar el estar a tu lado, platicar de todo un
poco y mirarte esos bellos ojos que resplandecen en tu faz. No imaginas como el
corazón me da vuelcos y la sangre arremete como caudaloso
río que traspasa todo lo que se interpone en su camino cuando advierto tu presencia. No imaginas, siquiera
un tantito, lo tanto que me haces sentir bien por como alegras mi alma y le inyectas
un cúmulo de dulces ilusiones, y todo tan sólo por tu hermosa presencia. En
verdad no imaginas lo tanto que te amo, y lo que daría por estar a tu lado para
cuidarte y protegerte. Pero, ese es mi secreto de adoración, y es mi deber
mantenerlo así, aunque de pronto tanto amor inunde mi corazón y se vuelva incontenible. No obstante, debo
mantenerme al margen, reprimir mis deseos y frenar mi espíritu. Virar mis ojos
en otro sentido, dar la vuelta a la página de mis pretendidas y desatinadas ilusiones,
y además de todo, cerrar el libro completo de una lectura ajena a mi corazón.
Mujer de otro, adoro toda tú; mujer de mis ingobernables esperanzas muertas, a
la que amo en el profundo silencio de mi mente, corazón y espíritu, te llevaré
por siempre hasta el fin de mis días. Te amo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario